sábado, 11 de agosto de 2018

Despertares...


Los primeros rayos de sol entraban por la ventana dando los buenos días. Intenté abrir un ojo y no podía así que decid abrir el otro y tampoco por lo tanto no insistí más y me di la vuelta porque sino podía abrir los ojos, menos aun podría levantarme y bajar la persiana. Tampoco quería privarme del fresquito que entraba a esa hora de la mañana. El sexo esta bien, pero dormir en Agosto tapadita por el fresquito es otro rollo.
Volví a dormirme no sé cuanto tiempo más porque cuando desperté había perdido la noción del tiempo. No os ha pasado que muchas veces cuando despertáis no sabéis ni día, hora, lugar donde os encontráis. Me tomé unos minutos para ubicarme. Era de día (por la ventana entraba un sol de justicia y hacia calor), la hora vendría siendo por el mediodía porque no tenía reloj donde mirar la hora. PERDÓN!. En una de mis mesita de noche tengo un reloj. DONDE ESTÁ EL RELOJ??..., esa pregunta me llevó a deducir que el lugar donde estaba no era MI CASA. Y entonces es cuando me dejé de pereza y me levanté sobresaltada. Miré alrededor mía para intentar ver si algo me era “familiar”. Y a pesar de que no era mi casa todo lo que había si me era “familiar” y me quise morir. Entonces me pasó como en las películas estas que al final van saliendo todos los flashback para darle sentido. Me volví a tumbar y taparme la cabeza. No podía ser.
Mientras me machacaba mentalmente la puerta se abrió y hubiese dado cualquier cosa para que la tierra me hubiese tragado en ese mismo instante. Mi lado cobarde se hizo la dormida, para no enfrentarse a lo que le esperaba por lo menos no tan pronto sin antes ordenar las ideas.
Su respiración en mi espalda lo notaba como si me clavasen cuchillos y su mano en mi mejilla como una trituradora.

- Buenos mediodías..., no crees que es hora de levantarse?.

El corazón me iba a más de mil..., abrí lentamente los ojos y al cruzarme con sus ojos verdes no sé si me calmó o me alteró más.
Qué clase de conversación se tiene cuando has vuelto a caer en el mismo error?. Yo no tenía más argumentos que me justificaran del porque había caído de nuevo así que sin mediar palabra recogí mis cosas y me fui.