lunes, 18 de junio de 2018

Reflexión...

No sé si somos inconformistas por naturaleza o es que vivimos en un mundo que va acelerado e igual que su tecnología que nos hartamos de todo en nada de tiempo y tenemos que pasar a otra cosa en breve porque entonces entramos en depresión. Creo que no sabemos disfrutar de lo que tenemos, no lo valoramos. Deseamos algo y luchamos por ello y cuando lo conseguimos nos hartamos como si no hubiésemos valorado el esfuerzo para conseguir nuestro objetivo. Y así una cosa y otra..., para finalmente sentirnos frustrados. Y no nos damos cuenta que lo que vale la pena no es el objetivo en si sino el camino que nos lleva a ello que a veces puede ser tortuoso y sacrificado, pero a pesar de todo lo que te da la felicidad del objetivo son los pasitos que vas dando hasta conseguirlo.


         

Nota:
En otro orden de cosa; me viene bien el tema para decir a toda aquella gente que estaba harta del tiempo que teníamos y quieran calor..., los 38º se lo instalaba yo en su casa todo el año.  

2 comentarios:

Marino Baler dijo...

Y a mí se me ocurre decir, ¿qué pasa cuando hemos conseguido aquello que anhelamos?
Creo que jamás estaremos satisfechos, ya que siempre querremos más, nuevos objetivos e ilusiones. Supongo que somos inconformistas por naturaleza.

Besos


PD. Aquí en Zaragoza ha hecho fresco hasta ayer. Hoy es el primer día en el que me pongo manga corta.

Casteee dijo...

"¿qué pasa cuando hemos conseguido aquello que anhelamos?". Disfrutarlo. Tener objetivos e ilusiones es la gasolina de nuestra vida pero cuando lo conseguimos nos volvemos a quedar vacíos y es como sino hubiésemos disfrutado del camino que nos ha llegado a ello.